31/7/07

Lo importante, lo externo*

Tanto hombres como mujeres coincidirán que este estilo de cuerpo es responsable que litros y litros de baba caigan de las bocas de todos los argentinos día a día. “Lo que importa es lo adentro” reza el dicho careta que se contradice y recorre nuestra sociedad. Es más, esa misma careta es compartida en otros niveles muy diferentes al de la moda, como por ejemplo la política ¿Qué comparten exactamente? La prioridad en lo externo. La belleza burguesa de “glúteos perfectos”, glamour, escandaletes y chusma que chisme, es funcional y equivale a toda una tradición de prioridades de nuestra clase dirigente. La historia de nuestro país se caracteriza por priorizar siempre los intereses extranjeros, con sus exigencias y pagos interminables, gracias al eterno enamoramiento de nuestra clase dominante con las sociedades “civilizadas”.Pos estallido popular y el ya a esta altura olvidado “que se vayan todos”, nuestra devaluada economía, paradójicamente, hizo elevar nuestros números macroeconómicos. ¡Que bárbaro! ¡Que gran logro de este gobierno! Sin embargo, las prioridades siguen siendo las mismas de siempre y los problemas internos solo son parte de un speech demagógico, en una especie de Deja-vú con tendencia hacia el infinito (que no es punto rojo). Pedir un cambio de orientación equivale, hoy por hoy, exigirle a la revista Playboy que ponga en su tapa a Ana María Giunta en bolas solo porque es una mina re copada. Desocupación, educación, salud, la explotación de nuestros recursos naturales, los graves problemas ambientales (No todo es “la argentinidad al palo” versus las papeleras uruguayas) y otros tantos temas más que nos aquejan día a día, no son prioridad, ni hay indicios claros que vayan a serlo (aunque nos quieran vender que tenemos que pintarnos la cara color esperanza).¿Cuál es el proyecto de país de nuestra clase dirigente? ¿Qué piensa en verdad nuestro presidente y su esposa-kandidata? ¿Realmente creemos que es el presidente de los Derechos Humanos??? ¿Tiene convicciones como Lion Gieco??? Hoy de repente algunos medios empezaron a hablar de inflación, de corrupción y de la incertidumbre que nos espera para el futuro, luego de ser cooptados de las maneras menos disimuladas, aunque sí efectiva. El problema es que éstos siguen acotando y mostrando siempre las mismas opciones, que no difieren mucho en lo escencial…nuestro bienestar y el porvenir de los que no nacimos en la cunita de oro. ¿Donde esta Julio Lopez? ¿La chica de Tucuman no tiene más hambre? ¿Por qué no se verificó la deuda con el FMI? ¿Donde esta la plata de Santa Cruz? (descontando que la otra mitad desapareció) Falta poco para unas nuevas elecciones presidenciales y sería recomendable que la gente exija respuestas concretas, para que de una vez por todas lo importante deje de ser lo externo.Igualmente hay que admitir que esos glúteos están bárbaros.


*Fotos utilizadas solo con el único objetivo de llamar la atención del lector. Idea robada del video “Hip hop” de Dead Prez.

*Versión editada de Quedishu? N°1

23/7/07

Edwin Pluscuamperfecto



Estos dibujos fueron hechos por Diego Defeo.
El nombre de este simpático pajarraco es Edwin Pluscuamperfecto. De descendencia libano-portuguesa, simula defender los intereses de las minorias irrespetadas. Se rumorea que frecuenta las zonas de Almagro y Congreso en busca de yerbas exóticas y libros prohibidos que se encuentran perdidos desde la época del proceso. Sobre los rumores que sería pariente lejano del actual presidente, el ministro del Interior, al ser consultado, contestó con su típica irreverencia y negó rotundamente alguna conexión entre ellos.

Ante cualquier dato, por favor comunicarse a quedishu@gmail.com
Muchas gracias.





7/7/07

Silla (inédito)

Me senté en un bar.
En el bar de la esquina de la calle Rojas.
Marrón porosa, tambaleante
olía en ella la sed de espera.
La madera rancia
pintada de crema.
Mis zapatos enroscados
la acariciaban.
Mi mano dormida
rasguñaba el cuero.
En mi espalda, su rigidez plana,
erecto descansó.
Mi cuerpo somnoliento
bañaba la silla.
Mi mirada, la ventana
sostenían la silla.
Mis pasos contados
caminaban la silla.
Mi cola chata, sentaba la silla.
Cada día me hacia más silla,
más parte de ella.
Y afuera ella, miraba sillas
números, dinero, encargos
horas.

Y ahí, entre toda esa nada
yacía mi calma de oscuras penas.
Y aquí debajo de la silla
a dos pasos de la puerta, dos pasos de ella
decidí para ser más o menos silla
contarles un poco esta historia.

Rocio



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